ValenciaCF 0-0 SevillaFC: Empate de doble cara

 en Liga

El SevillaFC cosechó un buen empate a domicilio en Mestalla. El punto tiene una doble cara, por un lado, la confirmación de la semi recuperación de la mini crisis en la que venía envuelto el Sevilla. Por otra, insuficiente para la pelea por la tercera posición, que se aleja de nuevo a 3 puntos mas el golaverage perdido con el Atlético.

Salía de nuevo sin delanteros Sampaoli en Mestalla. O no, porque Joaquín Correa empezó de 9, y terminó de casi todo lo que se puede jugar en ataque. Otro buen partido del primer gran fichaje para el año que viene, que está aprovechando estos últimos partidos del año para presentarse como de lo mejorcito del equipo y tirando del carro con sólo 20 años.

Después, se vió obligado a introducir a Jovetic por el lesionado Vitolo. El final de temporada del canario, entre desquiciamientos, idas y venidas con la selección, y pequeñas lesiones, está siendo desolador, cuando estaba llamado a ser uno de los grandes líderes del curso del Sevilla.

Ganó el Sevilla con el cambio. A los pocos minutos de salir, el montenegrino dispuso de la ocasión más clara del partido, pero en el mano a mano con Alves envió el balón al palo. Enfrente, el Valencia también apretaba, y Mariano sacaba un balón en la línea cuando todo el estadio pedía el gol.

En la segunda mitad, mucho toma y daca pero nada serio. Los dos equipos se tuvieron demasiado respeto, demasiado miedo a la derrota, y así, ninguno atacó de verdad.

Aparte de todo esto, se pidió un penalti de Lenglet a Zaza, pitable, y el árbitro se comió unas manos y falta de Alves fuera del área a Nzonzi clamorosa, pero todo terminó, como no podía ser de otra forma, en amarilla a Iborra por llamar la atención al árbitro sobre la jugada.

Al Sevilla, se le nota una falta de punch alarmante para las alturas de temporada en las que estamos. Parece que llego con el depósito en reserva y algo más, sin combustible para llegar a una meta que, con lo poco que queda, se ve lejísimo ahora mismo.

Queda apelar a los partidos de casa, a ese Sánchez-Pizjuán recuperado para la causa, y sacar algún puntito más fuera de casa para mantener el colchón con el quinto y asegurar la previa de Champions. Porque la tercera plaza, visto lo visto, es una quimera ahora mismo para este Sevilla justito de fuerzas y de fútbol.

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